Cierra tus ojos por un momento y regresa, veinte, treinta o cuarenta años atrás, justo ahí, cuando eras un niño o una hermosa niña y corrías y brincabas y reías cada treinta segundos. Tómate unos segundos mas, respira hondo, relájate y vuelve tu mente a aquellos momentos, al mas feliz que recuerdes. Siente como la atmósfera te envuelve, recuerda los aromas de cuando tu madre cocinaba aquel delicioso pastel o tu comida favorita; solo permite un instante el libre paso a aquellas emociones y sensaciones que son la base de lo que ahora eres, ¿como era aquella niño o niña que eras?.
Aquel pequeño ser, tenía perfectamente claro: quien era, a donde iría o que haría y como lo haría. Lo tenía claro porque era feliz con aquellas cosas simples, con la imaginación que lo llevaba al éxtasis de la alegría. Sabía que juguetes le gustaban, que juegos, con quien jugaría -imaginario o real-. No existían límites; si no tenía el juguete costoso o simplemente ninguno otro, aquel niño inventaba el juego, definía las reglas y lo hacía posible. El punto es: lo tenía perfectamente claro.
¿Porque hacerte estas preguntas?, si estás teniendo esa sensación de que algo falta en tu vida, de que el tiempo se está pasando y nos has lograda nada o bien con frecuencia te asaltan esas crisis existenciales de mediana edad en las que te preguntas: ¿que es lo que realmente me gusta hacer?, ¿en que parte del camino me olvidé de mis sueños y dejé de perseguirlos?, ¿esto es lo mas alto que alguna vez llegaré a estar?, ¿estoy disfrutando de mi vida?.
Al llegar hasta este punto, es hora de entrar a zona de recarga, es tiempo de concentrar energía y disposición para conocer cuales son nuestros objetivos y los valores que están respaldando estos objetivos. Los valores fundamentales, nuestro motor y razón de ser; cada átomo, cada célula de nuestro cuerpo reacciona conforme a ellos..
¿Como saber cuales son mis valores fundamentales?, es un ejercicio que requiere de toda honestidad y sobre todo disposición y disciplina para hacerlo; el esfuerzo bien vale la pena; te dará rumbo, brújula y un extraordinario sentido de que estás navegando en la dirección correcta. Si, pero como saber cuales son mis valores fundamentales; muy bien, favor de tomar nota:
METODO
1)Regálate por lo menos 20 minutos, ya sabes, lo de siempre, nada de distracciones, apaga el celular, quita el facebook, el twitter, el Hi5, el mail, la blackberry; nada de distracciones, cero; solo tú…
2)Hoja y pluma; no tengo nada en contra de la tecnología, tampoco porque digan que Carlos Fuentes, Garcia Marquez o Javier Velasco utilizan papel y pluma para escribir. Te recomiendo papel y pluma, por que si o haces electrónicamente seguro caerás en la tentación de refrescar el facebook y escudriñar en la vida de los otros..
3)Escribe los objetivos que tengas como persona, expresados en positivo, por favor no mal vibrar y decir lo que no quieres, eso no le funciona a nadie. De preferencia un objetivo de cada rubro relevante de tu vida: profesional, salud, espiritual, familia, dinero social. Los objetivos, así como en la escuela: específicos y medibles. ¿me faltó alcanzables?, eso tú lo decides…
4)Siguiente, a encontrar el valor fundamental detrás de cada objetivo. El método es el siguiente; lees tu objetivo y te preguntas: cuando logre mi objetivo: ¿que obtendré? y lo anotas. Sobre lo último que acabas de anotar, te haces la misma pregunta y lo anotas; así sucesivamente. ¿cuando te darás cuenta de haber llegado al valor fundamental?, cuando comiences a ser repetitivo al contestar la pregunta ¿que obtendré?..
La importancia de mantener congruencia entre nuestros objetivos y valores es mas que importante y crucial, pues de ello depende en enorme medida que alcancemos nuestros objetivos y al hacerlo, sentirnos extraordinariamente plenos…
El método anterior es solo un extracto del libro: Coaching con PNL, O´Connor Joseph y Lages Andrea, Editorial Urano.
JMSB